Tecnología adaptada

Como se ha mencionado en artículos previos, los espacios tanto habitacionales como laborales son lugares de interacción y convivencia social. Por lo tanto su diseño y funcionalidad deben estar adecuados a las necesidades no de un individuo sino de una comunidad.

Esta situación puede resultar complicada si tomamos en cuenta la infinita cantidad de variables dentro de esta ecuación. Las diferencias en cuanto a edad, género, complexión, estatura, etc entre los diferentes usuarios, arrojan necesidades muy particulares para cada uno de ellos y teniendo el espacio ciertas limitaciones dimensionales, es una tarea prácticamente imposible el satisfacer de manera puntual todas las variantes de una misma problemática.

Sin embargo, las limitaciones dimensionales y logísticas que no alcanzan a ser resueltas de manera directa, habrán de ser atendidas mediante un enfoque tecnológico. BTicino desde hace tiempo ha marcado la pauta en cuanto a automatización y control eficiente de los espacios.

Uno de sus productos más destacados en cuanto a multifuncionalidad, es el sistema de control remoto a rayos infrarrojos el cual mediante un emisor de control remoto, permite encender o apagar cargas eléctricas o bien accionar a distancia persianas, cortinas, etc.

Algo verdaderamente particular del sistema, es el hecho de que entre el punto de mando (control remoto) y el receptor (aparato que se desea controlar), no existen conexiones eléctricas, lo que permite una adaptación plena inclusive en lugares que requieren de un elevado grado de seguridad, como pueden ser espacios para personas discapacitadas, individuos de la tercera edad o inclusive niños pequeños.

Como podemos ver, la tecnología constituye una herramienta universal mediante la cual es posible atender de manera sistemática las necesidades de cada persona.